Discriminación

Una privación de derechos es lo que me parece la medida que se piensa tomar relativa a la prohibición de espectáculos taurinos en los que participen "enanos" del Ayuntamiento de Zaragoza siguiendo el ejemplo de otros…

Vaya por delante que no me gustan este tipo de espectáculos, no me hacían gracia ni cuando era un niño, para mi era mucho más llamativa una corrida de toros que este tipo de espectáculos. Pero esto no quita que tengan su público, haya gente que les parezcan entretenidos y disfruten de esta variante de espectáculo cómico.

En mi opinión es éticamente reprobable el discriminar laboralmente a personas si padecen alguna deficiencia física, siempre que esta no les impida ejercer normalmente sus funciones. Con esta medida se está impidiendo trabajar, que es lo que hacen ganarse el pan que está muy caro, a las personas que padecen algún tipo de "enanismo" en los espectáculos cómico-taurinos.

Estas personas se dedican a este trabajo voluntariamente, no se de ningún caso de gente "forzada" a participar este tipo de espectáculos. Me consta que quienes participan en ellos, enanos o no, se sienten muy toreros y disfrutan plenamente de su profesión.

De estos espectáculos cómico-taurinos han salido multitud de matadores de toros, valgan como ejemplo Ortega Cano o Antonio Chenel "Antoñete" y cómicos de la talla de Mario Moreno "Cantinflas"...

Juan Torres del “Bombero Torero” se ha mostrado muy preocupado por esta prohibición, entre otras cosas ha declarado lo siguiente “Nosotros no podemos ir a una obra a cargar un saco de 25 kg de yeso o acudir a un banco a pedir trabajo porque no nos contratarían. Ahí veo yo más discriminación y, gracias al toro, podemos desarrollarnos profesionalmente y sacar adelante nuestras familias. Nadie nos pone una pistola para participar en este tipo de espectáculos y somos personas adultas todas, con capacidad de decisión”

Antes de, como siempre, cargar tintas contra el mundo del toro, esta hipócrita sociedad podría hacer un análisis de si misma. Las gentes de toro tienen muy claro que en la arena todos son iguales y todos están expuestos a lo mismo, la muerte.

¡Nada más que añadir!