Torería

El domingo pasado no escuché ningún programa taurino en la radio. La verdad antes lo solía hacer, pero ahora cada vez me cuesta más… cosas de la edad…

Gracias a lo escrito en “cornadas para todos” he podido escuchar la entrevista de Manolo Molés a Adrián Gómez.

Torería, bien descrito Andrés, eso es lo rebosa este hombre, torería y valor, mucho valor…

No se lamenta por su situación, no se lamenta por si mismo, se preocupa por su mujer, su amor, y admira su valentía. Y lo que más dolor le produce es no poder jugar con su hijo…

Todo lo que pide... una semana de vacaciones en un hotel para poder disfrutar con su amada unos días.

Eso es torería Adrián y lo demás son cuentos.

¡Mucho ánimo torero! y gracias una vez más por tu ejemplo.

Mentiras

Una sarta de mentiras es todo lo que nos ha contado el señor Luis Fernández, presidente de Radio Televisión Española,“la de todos”, esta tarde en el Congreso.

Cuando uno miente tiene el peligro de que los demás conjeturemos sobre el motivo de sus mentiras… Televisión Española lleva dos años sin emitir corridas de toros. Su excusa principal es que las ferias importantes las cubren las televisiones de pago.

Estas emisoras llevan más de 10 años dando estas ferias y nunca ha habido problemas en que TVE se reserve unas fechas importantes, ya saben el interés general, así que esta excusa no vale.

La segunda excusa se basa en su poco rendimiento económico. Bien, que me explique como consiguen ganar dinero el resto de televisiones con toros y ellos no dejan de perderlo sin toros. Les guste a los anti-taurinos o no cada vez hay más aficionados en las Plazas de Toros y cada vez hay más gente que se abona a las ferias en las televisiones de pago. Sí hay una demanda taurina en la sociedad aunque se intente vender lo contrario por todos los medios habidos y por haber.

Tercera excusa… el horario infantil… ¡Por Dios! que revisen la programación que se emite en horario infantil y se dejen de sandeces con los toros, ¡por favor!... no digo más.

Como supongo que se nota por el tono de este escrito estoy bastante enojado, algo que me ocurre siempre que interpreto que se me toma el pelo.

En mi opinión, y esto es una opinión no una acusación, este señor debía de haber salido en el Congreso y haber dicho: Efectivamente, los festejos taurinos, mal que les pese a muchos, son un referente cultural, despiertan interés social y representan un gran atractivo para un importante número de personas, todo esto los convierte en un negocio muy rentable que hemos decidido regalar a algunas empresas a quienes debemos y de las cuales esperamos favores….

Y el pelo que se lo tomen a su padre… ¡hombre por Dios!

Insensatez

Ha llegado a mis oídos que desde no se que programa de no se que televisión se ha impulsado una plataforma, o algo parecido, para pedir que se termine con las subvenciones a las corridas de toros. También que circulan correos electrónicos pidiendo la movilización para tal fin.

Los festejos taurinos, como tales, no reciben ningún tipo de subvención por parte de ninguna institución autonómica, nacional o europea. Estos iluminados que pidan lo que quieran, es muy posible que la estupidez de la gente les lleve a conseguir, ellos sí, algún tipo de subvención no se sabe para que. No estaría de más que se informasen antes de reclamar algo...

Las únicas subvenciones a las que se podrían referir son a las que pueden llegar a acceder algunos ganaderos, como las que reciben todos los ganaderos que crían ganado extensivo en Europa, porque está probado y reconocido que son unas reservas naturales necesarias para mantener especies y ecosistemas autóctonos. Si protestan por esto… poco más hay que decir, más que es una insensatez.

Por otro lado el teatro, el cine español, el ballet, las bandas de música…. todos estos hechos “culturales” sí son subvencionados. Nadie protesta por ello y, aunque no es así, podría parecerme bien por defender la cultura…. pero si eso es así pido subvenciones para los festejos taurinos.

No entiendo por qué en mi ciudad, en el “Palau de la Música” se organizan interesantísimos conciertos en los que actúan las filarmónicas más importantes del mundo. No lo entiendo porque, por desgracia, no hay público que lo demande, más que una veintena de personas que asisten a estos eventos. Las Administraciones hacen un esfuerzo y corren con los gastos de estos espectáculos por defender la cultura.

Pues bien, me parecería correcto si a mí, que me gusta otro hecho cultural como son las corridas de toros, la administración se encargase de traerme los toreros y ganaderías de más interés y además a precios asequibles para todos los bolsillos. Esto no ocurre, la Administración no solo es que no se preocupe por la cultura taurina, es que cobra un elevado canon a quienes explotan las plazas de toros y en algunos casos hasta porcentajes del taquillaje… no es que no lo subvencione, es que se enriquece con ello, perjudicando a los MILES, aquí si no como en “El Palau”, de aficionados que acuden cada año a los plazas de toros…

Yo creo que las Administraciones Públicas están para otras cosas, para organizar espectáculos no. Si quieren subvencionar películas, obras de teatro, conciertos… como defensa de la cultura me parecerá estupendo siempre que no se discrimine y se subvencionen todos los hechos culturales que lo soliciten, de lo contrario solo me perecerá una cacicada.

Y a quienes reclaman que se eliminen las subvenciones a los toros primero que se informen y que sepan que no las hay y segundo que protesten por todo el resto de subvenciones estúpidas que se prestan por las distintas administraciones y merman las arcas públicas para abordar proyectos socialmente más beneficiosos.

Por favor, menos insensatez y llamemos a las cosas por su nombre

Gracias

De nuevo me acabo de ilusionar al leer sobre la mejoría de Adrián Gómez.

Adrián, por motivos infinitamente más banales que lo que te a ocurrido a ti, infinitamente, yo este verano lo he pasado mal y tu me has ayudado.

No te conozco, se poco de ti, incluso no recuerdo haberte visto torear... pero la noticia de tu percance me ha conmovido mucho y no he dejado todo este tiempo de pedirle a mi Dios por ti….

No se si esto te servirá de algo, pero me gustaría que supieses que el haber leído noticias sobre tu mejoría para mi ha sido una alegría dentro de mi estúpida angustia personal y de verdad que me has ayudado mucho.

Supongo que nunca leerás esto, por si acaso ¡gracias torero!

Ahora a seguir luchando….

Llegará en invierno y con él...

Llegó el otoño... pronto llegará el invierno y con él la esperanza de una nueva primavera....

La esperanza es quien mantiene vivo el alma. Jamás saltaría un torero a la arena sin esperanza. Sin duda temerá la muerte, pero arriesgará con la esperanza de la Gloria.

Una corrida de toros es un pequeño compendio de la vida.

Cada día tenemos que levantarnos con esperanza, luchar por ella, no dudar. Hay que ser fuertes, no podemos hundirnos en nuestros miedos, por nosotros y por nuestra esperanza hay que pelear.

Debemos ser conscientes de nuestro pasado, pero es algo por lo que ya no podemos luchar, el pasado hay que honrarlo y aprender de él. No se puede torear un mismo toro dos veces, en este juego de la vida y de la muerte las oportunidades son únicas....

Hay que luchar con esperanza en el presente, solo así el futuro nos llevará a la Gloria.

Ser, estar, parecer, asemejar….

Ser, estar, parecer, asemejar…. Torero. Son cosas muy distintas.

SER Torero. Es algo innato. Se nace Torero, se es Torero. Un Torero es un valiente, alguien capaz de enfrentarse a sus miedos y luchar contra ellos. Quien no tiene miedo no es un torero, es un inconsciente. Torero es la persona que cree en el sentimiento, en el Amor, en las emociones. Alguien romántico, artista, valiente…. eso para mi es un Torero. Hay gente muy torera en la vida que jamás habrá pisado una plaza de toros. Hay gente que torea que jamás serán Toreros…. contradicciones, pero realidades….

ESTAR en Torero. Quien dedique su vida a una cosa tan bonita y tan pura como es torear debería de ser Torero y además tiene la obligación de parecerlo. Si se tiene la suerte vivir del Arte más puro que existe en esta vida, si se tiene la inmensa fortuna de poder reflejar tus sentimientos en el albero con la materia prima más maravillosa que existe, el toro bravo, hay que estar en torero. Estar en Torero es respetar las tradiciones, los momentos, la indumentaria… ¡Todo!. Es respetar al aficionado que se emociona con este Arte, respetar a tantos otros que a lo largo de la historia han dado su vida por esto y fundamentalmente respetar el toro bravo. Se tienta de corto, por ejemplo… que “el hábito hace al monje”.

PARECER un Torero. Frustración de quien no puede SER, pero le gusta ESTAR en Torero….

ASEMEJAR un Torero…. lo que le ocurre a la mayoría de quienes torean actualmente... hay pocos “toreros” que realmente sean Toreros…. la pena es que muchos ni lo parecen… y jamás podrán serlo….

Reflexiones

El pasado domingo después de ver la encerrona de Morante de la Puebla en Zaragoza pensé que los “aficionados” tenemos que reflexionar sobre muchas cosas, al menos yo.

Reflexionar sobre el nivel de exigencia que se tiene con unos Toreros y con otros. Con unos toros y con otros.

Reconozco que estuve tentado de coger el coche y hacerme 300Km hasta Zaragoza de ida, después otros 300Km de vuelta, ya lo hice el mes de junio. Esta vez me venció la pereza y el viaje que me esperaba al día siguiente hasta La Coruña y lo vi por televisión.

José Antonio salió con pocas ganas, al menos eso parecía, se excedió de inicio en los tiempos de unas faenas que no decían nada y ante una tarde de seis toros, la brevedad es un punto. No hubo ningún tipo de variedad, ni de capote ni de muleta, que es algo que se ha de exigir a alguien que afronta un reto de este tipo y pretende salir victorioso.

La presentación del ganado desastrosa, la elección de seis ganaderías tan parecidas, un error premeditado… un desastre de tarde vamos.

No he leído grandes críticas sobre esta tarde. Si las leí la tarde de Miguel Ángel Perera en Las Ventas. Amén de las cornadas, Perera se mostró mucho más dispuesto que Morante y se presentó más dignamente, él si fue criticado.

El día anterior en Zaragoza Enrique Ponce fue Ponce y se inventó un toro, dos orejas, criticas por doquier a la concesión de los máximos trofeos.

Medimos, en esto me incluyo, con raseros distintos. Si Ponce hace “la de Morante” en Zaragoza el festejo no termina con 50 almohadillas en el ruedo, ¡termina con los antidisturbios!

Lo mismo nos ocurre a la hora de medir los hierros. He observado tímidos reproches al impresentable juego de las ganaderías “no comerciales” en esta feria, pero no críticas salvajes como las hubiese leído, sin lugar a dudas, si el mismo comportamiento descastado lo hubiese tenido cualquier sucedáneo de Domecq.

El quinto toro de Valdefresno, que se dejó Antonio Barrera, fue un toro de premio grande. Ha quedado en el recuerdo. Los "Cuvillos", aunque no guste, salieron bravos. Pero no se habla de ellos, de esos solo se criticará.

La corrida “asesina” de Miura del último día resultará ser un paradigma de bravura. Pero la realidad es que los “Miuras” estuvieron en lo que suele ser un Miura "moderno". En manso, con sentido, sin humillar, defensivos…. un compendio de defectos al que se enfrentaron tres valientes. Muy diferentes estos Miuras aquel que hace unos años coronó al mismo Jesús Millán como triunfador de la Feria de Abril. Aquel si metió la cara, empujó con los riñones e “hizo el avión” con su tremenda cabeza. Estos no.

Reflexionemos sobre las diferentes varas de medir que solemos tener los aficionados y fundamentalmente una cosa: si vemos la realidad o simplemente lo que queremos ver…..

Mini Feria del 9 de octubre

Este año, por diversos motivos he faltado a la miniferia del 9 de octubre en Valencia. A las novilladas no pude acudir por motivos profesionales. Gran idea reseñar los festejos un martes y miércoles laborables a las 5 de la tarde.

Al festejo del 9 de octubre, la verdad me plantee asistir. Después de meditarlo creo que no era digno el cartel que nos han presentado para una plaza como Valencia en una fecha, teóricamente, reseñada. Y después de lo visto en la Feria de Julio… decidí irme al campo ese día.

No he visto, pero he leído, sobre la cornada a Pedro Marín, me han dado escalofríos el leer las declaraciones del doctor Carbonell indicando que ha sido el percance más serio en esa plaza desde el de Curro Valencia.

Como he dicho no he visto este, pero si viví el pánico inicial tras las cornada a Curro y la consternación posterior. El desenlace final no ha sido el mismo, gracias a Dios, pero nos ha de hacer reflexionar sobre el mérito, muchas veces poco valorado, de todo aquel que se pone delante de un toro.

Creo que, de verdad, seriamente alguien ha de pedir responsabilidades a la empresa Serolo sobre su gestión en Valencia.

Lo ocurrido con el ganado el la pasada Feria de Julio ha sido un escándalo.

La elección de los novilleros para el concurso “Camino Matador de Toros” ha sido de juzgado de guardia, como se ha probado esto no ha sido una oportunidad, ha sido una tomadura de pelo para toreros y aficionados.

No es de recibo que a novilleros sin ninguna experiencia se les traiga así a una plaza de primera. En primer lugar por respeto a la categoría del coso y a su afición, en segundo lugar porque la inexperiencia de los lidiadores era evidente. Su ilusión les ha hecho afrontar con escasa preparación el reto, a unos como a Descals les ha servido para con mucha dignidad afrontar su realidad, a Marín ha estado a punto de costarle la vida.

¿Y ahora quién tiene la culpa?

Se tiende a verter todos los males de la cabaña brava al "monoencaste"… al encaste Domecq. Es cierto que, si en la variedad está el gusto, el que haya ferias en que solo esté presente este encaste no es bueno. A veces se hace un favor y entran los Nuñez

Bien, en mi humilde opinión que se generalice la cría de estos dos encastes, principalmente el Domecq, tiene toda su lógica, es un toro bonito de hechuras y que objetivamente, si sale bravo, embiste con mucha, mucha clase y gran codicia.

El problema es que se está perdiendo la casta. Se está seleccionando pensando demasiado en la comodidad del torero y sin pensar en la emoción, se está descastando el campo bravo en general.

Un triste ejemplo está siendo lo que llevamos de Feria del Pilar, que sobre el papel fui a uno de los pocos que le gustó. Hasta la fecha los “atanasios” de Dolores Aguirre, los “parladés” del Conde de la Corte, y los “albaserradas” de Adolfo Martín, todos han demostrado la misma falta de casta que sus hermanos más “comerciales”….

¡Maldita suerte!

Tarde de sombras para cerrar el otoño venteño.

No pudo ser, los de Peñajara, que me encantaron en San Isidro, no han sido lo que debían ser. Me esperancé con esta ganadería, viene de Baltasar Ibán, salimos del monoencaste y demostraron clase y casta.

En otoño me han defraudado, flojos, descastados, sin transmisión y sin clase… interesante variedad cromática, negros, coloraos, berrendos, jaboneros… has salido de todos los colores pero de iguales condiciones.

Frascuelo el más digno, y el más Torero de quienes pululan en este mundo del toro, una vez más, no ha tenido suerte, no dejará de buscarla.

No sabemos cuando tendrá una nueva oportunidad, si es que la vuelve a tener, espero que la tenga algún día y espero que él siga, después de tantos años, buscando su suerte como lo ha hecho hasta ahora….

Para mi eres un ejemplo, como torero y como persona.

Soledad

Siempre he pensado que una corrida de toros es un pequeño compendio de la vida. Un torero en la plaza no puede ocultar sus sentimientos, sufre, disfruta…. y al final la muerte.

Todo en la soledad del albero, el torero para triunfar o perder, para vivir o morir solo cuenta consigo mismo….

No llegan a las 2 de la mañana, es sábado por la noche, regreso de cenar con unos amigos, cada uno terminada la cena ha tirado por su parte, cada uno tiene su vida. Me he dado cuenta que vivo en soledad. He comprendido que en la vida solo me tengo a mi mismo. Como un torero en la arena no puedo confiar en nada ni en nadie, solo me tengo a mi, todo lo demás es un engaño.

En la vida, como en el toro, no se llega a nada sin sufrimiento y siempre está presente el dolor. Hace unos años me dejó mi mejor amigo. Son las cornadas de la vida. Las cornadas siempre son fruto de los errores

La suerte hay que buscarla, hay que superarla, pero como en el toro en la vida está muy presente. Pocos triunfan si no valen. Muchos valen y nunca triunfarán, les faltó la suerte. Yo en la vida he luchado por muchas cosas, nunca he conseguido ninguna.

Hay que seguir toreando, hay que seguir luchando. No podemos defraudarnos a nosotros mismos.

Yo, solo, mañana, como hará Frascuelo una vez más en Las Ventas, me levantaré con la intención de negar a mi suerte.

Aquí no estamos para gestas….

Aquí no estamos para gestas, al menos yo, a mi lo que me gusta es ver torear y con toros de verdad. Lo demás son milongas.

La encerrona de Miguel Angel Perera en Las Ventas, donde no he estado pero he seguido por televisión, ha sido para mi decepcionante.

Por distintos motivos, el viento, los toros…. se me ha quedado todo en una tarde de gestos. Muy valientes y muy toreros, pero gestos.

Gestos muy meritorios, es digno de alabar y algo a reconocer que el Torero tras una primera cornada tire de amor propio y quiera continuar la lidia, también que, sabiéndose herido grave en el quinto, se haya hecho un torniquete y haya seguido toreando como lo ha hecho.

Me parece fenomenal que el torero tire de raza y quiera realizar estos gestos, como digo me parece digno de alabar y ya podrían tomar nota otros muchos que reclaman oportunidades y desconocen lo que es la “vergüenza torera”.

Lo que no me parece bien en absoluto es que se consienta al torero, quien claramente en ese estado no es objetivo, seguir en el ruedo. Opino que debería incluso sancionarse el torear manifiestamente mermado de facultades.

Considero una irresponsabilidad el haber permitido, para empezar, que volviese a la arena tras el primer percance. Perera ahora está en estado muy grave, con una segunda cornada que la ha causado serias lesiones en la femoral. Sin saber el alcance de una herida así, por mucha casta que saque el torero, es una auténtica locura por parte de todo el mundo el consentirle seguir toreando con un torniquete. Por muy épico y romántico que nos pueda parecer.

Para estar delante del toro, por respeto al aficionado para empezar, hay que estar en plenitud de facultades… con un “huevo colgando”, Perera, no lo estaba y ya ven, ha pasado lo que ha pasado.

No podemos decir que su tarde haya sido un fracaso, tampoco un éxito, ha sido una tarde “heroica” pero no la tarde que le va a encumbrar como Figura del Toreo.

Dios quiera que se recupere y que sea pronto y pueda volver a demostrarnos lo que realmente vale.

El valor

En la Fiesta todo es valor y el toro es el más valiente de todos. Se trata de un herbívoro cuyo instinto, como el que tienen todos los otros bovinos, es el de huir ante el peligro. Pero no. El Bravo no es así, el bravo al sentirse acorralado, lucha contra su propio ser, supera su miedo y pelea, no se deja humillar.

El bravo da la cara, el bravo en el tercio de varas, sabiéndose herido, sabiendo que su vida está en juego, se arranca de lejos al caballo sin importarle lo que pueda ocurrir. El toro es un animal de honor, es conocedor del honor de la muerte y de la vergüenza de la cobardía.

En el campo bravo los toros pelean a muerte, un toro no hiere a un compañero y lo abandona a su suerte, no dejará sufrir a su adversario la humillación de la derrota, aunque rival le respeta. El toro peleará hasta que uno de los dos muera y cada cual obtenga su Gloria.

Al toro bravo, en la Plaza, no se le puede levantar la mano, no se le puede citar en corto, no se le puede plantar pelea en los adentros. Al bravo hay que llevarlo largo, con la mano baja y en el centro del ruedo. Citando de verdad y sin ventajas, primero porque merece pelear así, segundo porque de otra forma el torero tendrá muchos problemas…

El toro bravo va de cara por la vida, por eso en el ritual del toreo el toro pelea “a muerte” con el toreo, él marca las reglas, las reglas del honor, el toro tiene la oportunidad, y es al único animal al que se concede este privilegio, de quitarle la vida a su oponente y sobre todo, como ocurrió hace unos días en Barcelona, de salvar su vida.

¡Cuanto hemos de aprender del toro!